Violentos enfrentamientos entre bloqueadores evistas y la población de Llallagua desatan caos en el departamento de Potosí.
La localidad de Llallagua, en Potosí, vivió momentos de tensión y violencia cuando un grupo de bloqueadores evistas provocaron disturbios que incluyeron saqueos, agresiones a la policía y detonaciones de dinamita. La población clamaba por restablecer el orden público mientras la violencia se extendía por la zona.
La localidad de Llallagua, en el departamento de Potosí, se vio sacudida por disturbios violentos protagonizados por un grupo de bloqueadores evistas que descendieron a las calles del centro de la localidad. Los comunarios reportaron desmanes, saqueos a una unidad policial e incluso la agresión a un oficial de policía.

La situación se volvió tensa cuando la población intentó persuadir a los bloqueadores para que se retiraran, pero fueron recibidos con explosiones de dinamita, lo que obligó a los ciudadanos a retroceder y resguardarse en sus hogares. Desde las ventanas, residentes grabaron con sus teléfonos móviles cómo la turba saqueaba la unidad policial y se escuchaban detonaciones de petardos y disparos en el ambiente.

Los daños no se limitaron a la estación de policía, sino que también se reportaron saqueos en otras oficinas de instituciones públicas y establecimientos comerciales de la zona. Ante la magnitud de los disturbios, tanto la Policía como las fuerzas militares se desplegaron en la localidad, según testimonios de los comunarios de Llallagua, quienes clamaron por una intervención militar inmediata para restablecer el orden público.

A pesar de la violencia desatada, informes policiales descartaron la pérdida de vidas humanas en los enfrentamientos. Sin embargo, la tensión persiste en la localidad y la incertidumbre se cierne sobre el futuro cercano de la comunidad de Llallagua.
A pesar de la ausencia de víctimas mortales, los disturbios en Llallagua han dejado a la comunidad en un estado de incertidumbre y preocupación por su seguridad futura. La intervención de las autoridades ha sido necesaria para contener la violencia y restablecer la calma en la localidad.