Arturo Murillo, exministro boliviano, será deportado a Bolivia tras cumplir condena en Estados Unidos.

El Gobierno de Estados Unidos procederá con la deportación de Arturo Murillo a Bolivia, luego de cumplir una condena por lavado de dinero.
El exministro de Gobierno boliviano, Arturo Murillo, enfrentará su deportación a Bolivia después de ser liberado de la cárcel en Estados Unidos, donde cumplió una condena de cuatro años por lavado de dinero. Se espera que su regreso genere debate y atención por parte de la opinión pública, dada la relevancia de los casos en los que se encuentra involucrado y las posibles implicaciones políticas que puedan derivarse de su retorno.
El exministro de Gobierno boliviano, Arturo Murillo, enfrentará su deportación a Bolivia después de ser liberado de la cárcel en Estados Unidos, donde ha cumplido una condena de cuatro años por lavado de dinero. El ministro de Justicia, César Siles, confirmó que la liberación de Murillo está programada para el 21 de junio y que no se contempla la posibilidad de que sea enviado a un tercer país, ya que se descartó la especulación sobre su nacionalidad croata.
Siles explicó que, dado que Murillo no tiene derecho a solicitar asilo por haber cometido delitos, corresponderá al Gobierno de Estados Unidos proceder con su deportación a Bolivia. Esta decisión se basa en antecedentes como el caso de Sergio Méndez, cómplice de Murillo, quien también fue deportado a Bolivia tras cumplir su condena en Estados Unidos.
La situación legal de Murillo en Bolivia es compleja, ya que se le acusa no solo de irregularidades en la compra de gases lacrimógenos a sobreprecio, sino también de implicaciones en casos como Senkata y el suministro de material antidisturbios procedente de Argentina y Ecuador. A pesar de que el Gobierno boliviano había solicitado su extradición, se considera que la vía de la deportación es la más conveniente para su retorno al país.
El ministro Siles destacó que el retorno de Murillo a Bolivia permitirá avanzar en las investigaciones pendientes y en el proceso judicial que enfrenta en su país de origen. Se espera que su regreso genere debate y atención por parte de la opinión pública, dada la relevancia de los casos en los que se encuentra involucrado y las posibles implicaciones políticas que puedan derivarse de su retorno.
El retorno de Arturo Murillo a Bolivia permitirá avanzar en las investigaciones pendientes y en el proceso judicial que enfrenta en su país de origen. Su deportación representa un paso importante en la resolución de los casos en los que está implicado.