El Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, ha emitido un llamado urgente a la calma y a una tregua nacional en medio del clima de agitación política y la crisis económica que sacude al país. En una intervención en el programa «Hagamos Democracia» de la red Erbol, Callisaya expresó su inquietud por el peligro latente de que los actuales enfrentamientos sociales desemboquen en episodios de violencia.

El funcionario subrayó la importancia de evitar que las diferencias se resuelvan en las calles, haciendo hincapié en que es fundamental impedir que la situación derive en violencia, heridos o pérdida de vidas. En ese sentido, llamó a la reflexión y a buscar una salida pacífica a las tensiones que se han incrementado en el contexto electoral y ante la crisis económica que atraviesa el país.

Callisaya identificó una serie de factores que se han ido acumulando y que han contribuido a intensificar las manifestaciones. Además del componente electoral, señaló la creciente indignación ciudadana frente a la situación económica, elementos que se entrelazan en diversas protestas y que podrían llevar a consignas más radicales, como la renuncia del presidente.

El Defensor del Pueblo reiteró su compromiso con los principios democráticos y la importancia de asegurar un proceso electoral transparente, incluyendo la participación de los bolivianos en el exterior. En este sentido, destacó la necesidad de transitar este momento a través de elecciones justas que brinden certidumbre a la ciudadanía y afirmó el respaldo de la Defensoría del Pueblo a las transiciones democráticas.

Por último, Callisaya enfatizó que la Defensoría del Pueblo no responde a intereses partidistas, sino que su labor se enmarca en una agenda de defensa de los derechos humanos. Se comprometió a mantener el enfoque de la institución en promover el diálogo, documentar los acontecimientos y llevarlos a instancias internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) o el Subcomité para la Prevención de la Tortura, reafirmando su compromiso con la transparencia y la defensa de los derechos fundamentales de la población.